Cita 42 - “¡Rebeca! Regresa un poco atrás, querida. Párate justamente donde estás. Ahí está mi pequeña niña, quien algún día también será una profeta. Esa dama que está parada allí a tu lado, querida, con un sombrero blanco puesto: ella está sufriendo con un problema del seno frontal. Levante la mano o póngase de pie. Usted le está orando a Dios para que El permita que yo la llame, ¿es eso correcto? Deje que mi pequeña niña ponga sus manos sobre usted. (El hermano Branham ora por la dama).”
Cuando Sus Ojos Fueron Abiertos Jeffersonville, Ind., 4-18-57