LA EDAD DE EFESO 113
luz en muchos casos. Ahora, yo quisiera saber de dónde es que esta gente saca eso, siendo que son analfabetas y nunca han leído la Biblia. Pero igual como la historia del diluvio es conocida a través del mundo, también es conocida esta verdad de la caída del hombre. Ellos saben lo que sucedió allá en el Edén.
128. Ahora, en este momento alguien me va a hacer esta pregunta: ¿Le dijo Dios a Eva que se cuidara de la serpiente, o que la serpiente la seduciría? Ahora escuche, Dios no tenía que decir ni una sola cosa de lo que iba a suceder. Solamente obtenga la raíz de la cosa. Él simplemente dio la Palabra. Él dijo que no probaran de la ciencia. Prueben de la Vida. La Vida era la Palabra de Dios. La Muerte era cualquier cosa menos la Palabra de Dios. Ella permitió que se cambiara una sola palabra y allí es donde la sedujo Satanás. Dios pudo haber dicho: “No vayan a tomar frutas de los árboles más de las que puedan comerse.” Entonces Satanás podía decir: “Mira, pues eso es correcto. Se fijan que si toman de más, se pudrirán; pero aquí está un método para preservar las frutas; de modo que pueden tomar todas las que quieran. Así que ¿ya ven? pueden hacer lo que ustedes quieren y también lo que Dios quiere.” Allí mismo es donde el diablo la seduciría. Aquel que ha ofendido en un punto de la ley es culpable de toda le ley. No juegue con esa Palabra. Eso es exactamente lo que sucedió en la edad de Efeso antes que terminara como en el año 170 D. C.
129. ¿Y qué fue lo que produjo aquel árbol? El Árbol de la Ciencia produjo muerte. Caín mató a su hermano Abel; el malvado mató al justo. Allí se fijó una orden. Se mantendrá esa orden hasta la restauración de todas las cosas como ha sido dicho por los profetas.
130. El Árbol de la Ciencia produjo hombres mañosos, hombres de renombre; sin embargo sus caminos son caminos de muerte. La gente de Dios es una gente sencilla, pero de mente espiritual, inclinada hacia Dios y a la naturaleza, calmadamente labrando la tierra, estimando más a la verdad que a las riquezas. La simiente de la serpiente ha traído tremendos comercios, invenciones maravillosas, pero con todo esto viene la muerte. Su pólvora y sus bombas atómicas matan en la guerra; y en tiempo de paz sus invenciones mecánicas, como el automóvil, matan a mayor número de personas en tiempo de paz que lo que matan las invenciones de guerra en tiempos de aflicción. Muerte y destrucción son los frutos de sus labores.
131. Pero ellos son religiosos. Ellos creen en Dios. Ellos son como