LAS SIETE EDADES DE LA IGLESIA 14
de jaspe. En el versículo 9 dice que los animales le daban honor a ÉL (no a ELLOS). En el versículo 10 dice que los ancianos se postraban delante de ÉL (no de ELLOS); en el versículo 11 decían: “Señor, digno eres” (no SEÑORES). También en el versículo 11 dice que ESTE que estaba en el Trono era el Creador, que es Jesús (Juan 1:3), que es Jehová, el Espíritu del Antiguo Testamento (Génesis 1:1). Pero no vayamos a detenernos aquí. Lea ahora en Apocalipsis 3:21:
Al que venciere, yo le daré que se siente conmigo en mi trono; así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. También lea Hebreos 12:2:Puestos los ojos en el autor y consumador de la fe, en Jesús, el cual, habiéndole sido propuesto gozo, sufrió la cruz, menospreciando la vergüenza, y sentóse a la diestra del trono de Dios.
44. Note que según Jesús mismo, Quien escribió el Apocalipsis, Él está sentado con el Padre. El Espíritu en Pablo (el cual es el Espíritu de Cristo, porque ese es el Espíritu de la Profecía por el cual viene la Palabra), dice que Él está sentado a la diestra de Dios; pero cuando Juan miró, solamente vio a uno sobre el Trono. Y no fue hasta Apocalipsis 5:6-8 (lo cual sigue a Apocalipsis 4:2-3 en sucesión de tiempo) que vemos al Cordero tomando el Libro de Aquel que estaba sentado en el Trono, como indica Apocalipsis 4:2-3 y 9-11. ¿Qué es? Es el misterio de UN DIOS. ÉL (Jesús) salió de Dios, fue manifestado en carne, murió, resucitó y volvió al seno del Padre. Como dijo Juan en el capítulo 1, versículo 18: “… El unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le declaró.”
45. Era tiempo para que Dios (el Mesías) volviera a llevar Su Novia, y entonces presentarse (hacerse conocer) a Israel. Así que vemos a Dios viniendo nuevamente para tomar una relación humana con el hombre como el Hijo de David, Rey de reyes y Señor de señores, y como el Novio de la Novia gentil. No son dos Dioses, sino simplemente UN SOLO DIOS manifestando Sus poderosos oficios y títulos triples.
46. La gente sabía que Él era profeta. Ellos conocían la señal del Mesías, la cual solamente podía manifestarse a través de un profeta. Juan 1:44-51: