📖 El Libro de Edades - Pág 21
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LA REVELACIÓN DE JESUCRISTO 21 57. ¿Ven? Pablo, por medio del Espíritu Santo, dijo exactamente lo que dijo Pedro por medio del Espíritu Santo. Y lo que fue dicho no se puede cambiar. Tiene que ser lo mismo desde Pentecostés hasta que el último escogido haya sido bautizado. Gálatas 1:8: Mas aun si nosotros ó un ángel del cielo os anunciare otro evangelio del que os hemos anunciado, sea anatema. 58. Algunos de ustedes de la Unidad, bautizan equivocadamente. Ustedes bautizan para la regeneración, como si siendo sumergidos en agua lo salvara. Regeneración no viene por medio del agua; es una obra del Espíritu. El hombre, que inspirado por el Espíritu Santo dio el mandamiento: “Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre del Señor Jesús,” no dijo que el agua regeneraba. Él dijo solamente que era una evidencia de una “buena conciencia delante de Dios.” Eso era todo. Primera de Pedro 3:21: A la figura de la cual el bautismo que ahora corresponde nos salva (no quitando las inmundicias de la carne, sino como demanda de una buena conciencia delante de Dios), por la resurrección de Jesucristo. 59. Yo lo creo. Si alguien tiene alguna idea falsa de que la historia puede probar el bautismo en agua de cualquier otro modo que no sea en el Nombre del Señor Jesucristo, yo le aconsejo que lea los registros históricos y vea por sí mismo. Lo siguiente es un registro verdadero de un bautismo que tuvo lugar en Roma en el año 100 D. C., y fue publicado en la revista Time, el 5 de diciembre de 1955: “El diácono alzó su mano, y Publius Decius entró por la puerta del bautisterio. Parado en el bautisterio, con el agua hasta la cintura, estaba Marcus Vasca, el vendedor de madera. Él tenía una sonrisa mientras Publius llegó a su lado en el bautisterio. ‘¿Credis?’ le preguntó. ‘Credo,’ respondió Publius. ‘Yo creo que mi salvación viene de Jesús el Cristo Quien fue crucificado bajo Poncio Pilato. Con Él he muerto para que con Él pueda tener Vida Eterna.’ Entonces él sintió los brazos que le sostenían mientras él se dejaba caer para atrás en el bautisterio, y oyó la voz de Marcus en su oído: ‘Yo te bautizo en el Nombre del Señor Jesús’, mientras el agua fría se cerró sobre él.” 60. Hasta el tiempo en que se extravió la Verdad (y no volvió sino hasta esta última edad —desde Nicea hasta el comienzo de