LA PALABRA HABLADA
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venir tres veces. Ahora usted dirá: “Juan el Bautista era ese
tipo”. Si usted nota, Jesús dijo era – Juan el Bautista era el
mensajero de MalaquĂas 3, no MalaquĂas 4. “He aquĂ, envĂo Mi
Mensajero delante de Mi faz...” Pienso que es Mateo 11:6 en alguna
parte allĂ lo hallará, en Mateo el capĂtulo 11.
150. Ahora, pero en estos Ăşltimos dĂas habrĂa de venir un
espĂritu de ElĂas entre el pueblo, y Ă©l estará para hacer la
misma cosa que ellos hicieron allá atrás. Su naturaleza serĂa la
misma, la naturaleza de la Iglesia; la naturaleza de la – la
persona serĂa exactamente la misma. Y ese Mensaje saliendo,
tratando... Él serĂa odiado por la gente. Él odiarĂa a las
mujeres – las vulgares de todos modos, las malas; amará el
desierto; irritable, un tipo enojado todo el tiempo como ElĂas fue,
y como Juan. Y hemos visto toda esta cosa suceder. Si tuvimos el
Mensaje, vemos a Cristo rechazado. Él tiene que pertenecer a una de
estas organizaciones o usted no puede entrar a ellos. Asà que Él
está – Él está echado afuera. ¿Ve? Cristo no puede obrar en
medio de ellos.
151. “¿Qué es usted?”
152. “Un cristiano”
153. “¿A qué denominación pertenece usted?”
154. “No pertenezco a ninguna”.
155. “No nos sirve”. ¿Ve? Él es rechazado, Cristo. ¿Ve?
Rechazado. AsĂ fue ElĂas rechazado, y asĂ fue rechazado Juan.
Pero ¿qué...? ¿Los afectó a ellos? ¿Afectó su mensaje? Ellos
dijeron: “¡Oh, ustedes duros de cerviz!”. Ellos les dieron
duro. Ellos no se retrajeron de golpear. Ellos continuaron adelante.
Y el Mensaje de Dios seguirĂa moviĂ©ndose sin hacer caso de lo que
cualquiera diga (¿ve?), hasta la consumación, y cuando lo – que
está determinado sea derramado; estamos en el fin.
156. Ahora nos encontramos hoy a 40 años de retorno desde la
Primera Guerra Mundial, y los judĂos han regresado otra vez a su
propia tierra. Dios nunca tratĂł con Israel hasta que ella estaba en
su propia tierra.
157. Ahora, usted recuerda cuando los judĂos estaban retornando
de nuevo, esos judĂos de las otras naciones; y la revista Look dio
el