INSTRUCCIONES DE
GABRIEL A DANIEL 15
53. Nuestro Pariente Redentor. Los ancianos estuvieron correctos
cuando ellos lo llamaron un Cordero llegando a ser León, su Juez.
Él era un Cordero, usted sabe, con el Libro sellado con los siete
sellos. Cuando el Libro fue tomado, la obra de mediador fue
terminada.
54. Ahora, en el tercer capítulo la Iglesia subió, pero ahora
la redención está para ser revelada: cómo la Iglesia fue
redimida, la revelación de lo que ha tomado lugar durante la edad
de la Iglesia. ¿Ve? La Iglesia se ha ido. Así que Él ahora está
mostrando cómo Él lo hizo, en el capítulo 5, lo que tomó lugar,
cómo Él selló a la Iglesia: la revelación de Su Nombre, el
Bautismo en agua usando Su Nombre, la Vida Eterna, no infierno
eterno, la simiente de la serpiente, seguridad eterna; todas las
grandes doctrinas, predestinación de la Iglesia. Eso fue mostrado a
la Iglesia. Él está mostrando cómo Él lo ha hecho.
55. Ahora, a nuestro Pariente le fue entregado un Libro de
Redención sellado con siete sellos, de manos de Su Dueño original.
¡Amén! ¿Quién hallamos que fue el Dueño original? Dios mismo.
“Y el Cordero vino y tomó el Libro de la mano derecha de Aquel
que estaba sentado sobre el Trono”. ¿Quién era el Cordero? El
Redentor, nuestro Pariente Redentor, el Pariente de la Iglesia,
quien vino y redimió a Israel.
56. Ahora vamos a entrar a eso en esta mañana. Israel fue
redimido, pero eso no fue aplicado a ellos, porque ellos le
rechazaron; pero la Iglesia recibió su redención. Y Él es nuestro
Pariente Redentor. Como Booz tuvo que redimir a Nohemí para
quedarse con Ruth la moabita, una extranjera, una gentil; así
Cristo redimió a Israel, aplicó la redención, y fue rechazado.
57. ¿Usted recuerda el perdón del hombre que fue fusilado, el
cual yo algunas veces cuento, durante la guerra civil, siendo él un
buen hombre? Él era inocente, y ellos lo hallaron culpable; aunque
él era culpable en cierta manera, porque él huyó en tiempo de
batalla. Y lo hallaron culpable e iban a fusilarlo. Y un hombre fue
al presidente Lincoln y dijo: “Señor Lincoln, este es un hombre
cristiano. El muchacho fue amedrentado, conozco su gente. Él estaba
atemorizado, él no quiso hacer daño, él huyó”. Él dijo:
“Señor Lincoln, esto está