LAS SETENTA
SEMANAS DE DANIEL 107
19. El mensaje que usted ve esta mañana, eso está dibujado aquĂ
en el pizarrón, eso es meramente para hacer – para explicar
mientras prosigo, y tratar de hacer que usted entienda lo que yo
estoy tratando de decir.
20. Y estas setenta semanas de Daniel ha sido un gran estudio;
dos dĂas y dos noches, casi he estado desde el fin de semana aquĂ
en eso, tratando de hallar qué palabras decir por la Verdad. Eso
tiene que cuadrar con el resto de la Biblia. ÂżVe? Usted no puede
solamente tomar unas pocas Escrituras y hacer un – un concepto y
entonces decir: “Bien, esto es lo que esto dice”; y darse la
vuelta y decir: “Bien, pero aquà eso – eso dice algo más,
contradiciendo esto”. No puede hacer eso. Eso tiene que decir la
misma cosa todas las veces. Si no, pues entonces – entonces usted
está errado. Y esa es la manera en que yo he tratado de enseñarlo.
21. De hecho, en las cintas – siendo que eso está en las
cintas... Las grandes crĂticas que tengo sobre las cintas, de mis
hermanos en las diferentes partes del mundo, es creer en la gracia
de Dios –por cuanto enseño como lo hago– que fuimos
predestinados desde antes del principio del mundo.
22. Mis hermanos pentecostales, por supuesto, yo sé que sus
puntos de vista son legalistas (¿ve?), y yo – yo sé que esto es
un poco incĂłmodo a sus puntos de vista; pero usted como un
cristiano, hermano, ÂżdarĂa usted suficiente consideraciĂłn para
doblar sus rodillas ante Dios con su Biblia y pedir a Dios que se lo
explique a usted? ÂżHarĂa eso usted? ÂżTomarĂa el punto legalista
y tratarĂa de hacer una conexiĂłn desde GĂ©nesis hasta RevelaciĂłn?
23. Y “la simiente de la serpiente,” esa es la que acaba;
mucha gente no cree eso. Pero si usted leyera en Génesis, la Biblia
dice que la serpiente tuvo una simiente: “Y enemistad pondré
entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya”. AsĂ
que la serpiente tenĂa una simiente. Y si la simiente de la
serpiente fue espiritual, entonces JesĂşs no fue un hombre, asĂ que
la Simiente de la mujer fue espiritual. Ambos tenĂan simientes, y
la enemistad está todavĂa allĂ. La serpiente tenĂa una simiente.
Y si usted tan sĂłlo tomara su Biblia y se postra, y es bien
reverente ante Dios, yo creo que Dios